EL UNIVERSAL
jueves 3 de noviembre de 2011 08:27 PM
Santo Domingo.- Mateo Alou, uno de los tres hermanos dominicanos que vieron acción en las Grandes Ligas durante las décadas de los 60 y 70, falleció el jueves a la edad de los 72 años.
Alou murió en una clínica en Santo Domingo por complicaciones relacionadas con la diabetes, informaron los Leones del Escogido, equipo con el que jugó en la liga dominicana de beisbol, reseñó la agencia de noticias Ap.
"El beisbol dominicano en general, y los Leones del Escogido, en particular, han perdido a una de sus figuras más emblemáticas y a un extraordinario ser humano", indicó el presidente del club, Luis Manuel Bonetti, en un comunicado.
Alou fue campeón de bateo de la Liga Nacional con los Piratas de Pittsburgh en 1966, cuando conectó .342.
"Perdí a un gran amigo", comentó el retirado jugador puertorriqueño Orlando Cepeda, compañero de Alou en los Gigantes de San Francisco. "Fuimos compañeros de habitación varias veces con los Gigantes. Era un tipo muy gracioso, y un tremendo pelotero".
El jardinero y primera base jugó 15 temporadas en las mayores, donde debutó en 1960 con los Gigantes. También vistió los uniformes de Pittsburgh, San Luis, Oakland, los Yanquis de Nueva York y San Diego, equipo con el que se retiró en 1975.
"Aunque jugó con seis equipos distintos, Matty siempre fue parte de la familia de los Gigantes como un empleado y estará siempre vinculado con sus hermanos, Felipe y Jesús, como el primer trío de jardineros conformado por hermanos", dijeron los Gigantes.
En 1963, Alou hizo historia al jugar en el mismo jardín de los Gigantes con sus hermanos Felipe y Jesús.
"Es un legado de la familia", dijo Felipe en su época como manager de los Gigantes.
Mateo Alou acumuló promedio de .307 en su carrera, con 1.777 hits, 427 remolcadas y 236 dobles. Fue campeón de la Serie Mundial en 1972 con los Atléticos de Oakland, y perdió el Clásico de Octubre de 1962 con los Gigantes.
Felipe Alou aún cree que le costó el campeonato a los Gigantes en 1962 cuando no pudo hacer el toque en el noveno inning del séptimo juego de la Serie Mundial. Eso hubiera movido a Mateo de primera a segunda. Los Gigantes cayeron 1-0 en ese juego y los Yanquis de Nueva York se coronaron campeones.
En 2010, San Francisco logró finalmente conquistar el primer título de la ciudad desde que la franquicia se mudó en 1958.